viernes, 25 de febrero de 2011

RESPUESTA A ALMA PATRICIA JIMÉNEZ SOBRE APORTACIÓN CAP. 101

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

MI RESPUESTA A ALMA PATRICIA JIMÈNEZ DE ROJI POR SU BELLO COMENTARIO AL CAPÌTULO 10

GRACIAS A ALMA PATRICIA JIMÈNEZ DE ROJÌ POR SU profundo y bello comentario sobre el capìtulo X, Se nota como todo lo relacionado con Marìa nos llega profundamente a todos pero muy especialmente a las mujeres, para quien es un modelo a seguir en nuestro de seguir a Jesùs, ya que ella, como nadie màs, lo amò y tuvo fè en su misiòn a pesar de todos los peligros que èsto tenìa para su hijo, què difícil es para una madre saber respetar la vocaciòn de su hijo y verlo morir a una edad tan temprana y cuando contaba con toda la salud fìsica, psicològica y espiritual de un ser humano excepcional. Yo creo, como dice Alma que la veneraciòn a Marìa estriba en lo que ella fuè como persona, como mujer, como esposa, pero sobre todo, como madre que, junto con su padre educò a tal hijo. Pero creo, a diferencia de Alma, para venerar a Marìa su tìtulo de “Madre de Jesùs” que es el ùnico tìtulo que tiene un origen evangèlico, ES MÀS QUE SUFICIENTE para amarla y admirarla. El tìtulo que se le diò de Madre de Dios no es evangèlico, es eclesiàstico, es dado a ella por la Iglesia y èsto ha sido causa de divisiòn desde la proclamación del dogma, los demàs dogmas marianos tambièn han dificultado no solo el ecumenismo sino el que la Iglesia le de un trato digno a las mujeres respetàndolas como seres dignos de tomar parte en la vida de la Iglesia y de asumir cualquier cargo que se requiera en ella.




Respecto al cuidado de Juan a la muerte de Jesús no sòlo es una interpretación de un mundo machista como dice Alma sino que es solo eso, una interpretación de una experiencia interna que tuvo el Evangelista y que la plasmò en un relato totalmente simbòlico ya que los exegetas nos dicen que Jesùs no pudo haber emitido palabras en la cruz, posiblemente solo un gran grito. Pero Marìa es nuestra Madre porque su maternidad rebasa cualquier otra al haber formado a ese Hijo que nos lleva al Padre directamente, por lo cual no veo necesaria la intervención de ella pero sì la necesidad de imitarla, de conocerla, de platicar con ella como con la mejor amiga que sè que me entiende y que tambièn ella, como su Hijo, diariamente me toma de la mano para que juntas caminemos hacia nuestro “Abbà”.

jueves, 24 de febrero de 2011

Una piramide invertida.La "Santisima Virgen y Madre de Dios María"

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)
En este cápitulo debo reconocer que desde niña he tenido un gran conflicto con este tema.
La veneración a María la veo como una verdadera piramide invertida grande en la superficie y pequeña en su base Biblica,
Esta parte grande en la superficie es la que siempre me ha causado problemas, pues de los 4 titulos que se le dan a María el unico que vale para mi es Madre de Dios, este titulo es tan grande
que no entiendo como fue necesario incluir otros titulos que en el fondo tienen dudoso origen como son:Concepción virginal de Jesús, Su concepción Imaculada o el cuarto Su Asunción en cuerpo y alma.
Este ultimo cayo de mi gracia al ver su tumba en Jerusalen, ¡Para que hacer una tumba de alguien que vieron subir al cielo en cuerpo y alma?
La veneración de María estriba en una mujer tan llena de gracia que trajo al mundo al hombre más perfecto que es Dios con nosotros, hombre que es fruto del amor y que de carne y hueso nacio de María, que alimentó , educó y su testimonio de vida lo formó, sacando de ella la forma de tratar al projimo y de ver el mundo.
No existe mucho en el evengelio sobre José, quien debió ser un hombre extraordinario también, pero lo poco que puede uno ver es que María ademas de madre también fue una esposa amorosa y que San José mientras vivió fué el protector y jefe de esa Sagrada familia.
Si la tradicion a llenado de flores la interpretación de quien es María para mi solo la alejan y la presentan como tantas figuras mitologicas que no son historicas.
La oración por excelencia es el Ave María que con sencilles dice que es llena de gracia y que el Señor esta con ella y así bendito es su fruto, para después pedirle que ruegue por nosotros en los momentos dificiles, porque la sentimos cercana, que como madre ,esposa mujer de carne y hueso puede entender nuestro sentir y puede abogar por nosotros ante Dios ella que esta tan cerca.
Y como niños es el consuelo de tener una madre amorosa que nos cuida y quiere lo mejor para nosotros.
Pero cuando veo que su persona sirve para decirme que debo ser esclava, que todo lo guardaba en su corazón que aceptó la voluntad no solo de Dios sino de los hombres que crucificaron a su hijo sin decir nada mas que Hagase tu voluntad.
Me siento parte de un mundo machista que al ver la importancia que tiene una mujer y lo extraordinaria que puede ser tratan de hacerla diferente a mi llenandola de imposibles para que sea inalcansable.
Hasta el cuidado de Juan a la muerte de Jesús me parece una interpretación de un mundo machista, ¿Quien podia estar más llena del Espiritu Santo?
Aunque el culto a María parece estar lleno de fantasias, la devoción del pueblo es definitivamente el Espiritu Santo que le da su lugar como Bendita entre las mujeres, pero no niega su total naturaleza humana.

PARTICIPACIÒN DE ALMA JIMÈNEZ DE ROJÌ AL CAP. 9, 2A. PARTE

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

MIS COMENTARIOS AL CAPÌTULO 9, 2A. PARTE

Misterio que no puedo entender, pero que no cabe la menor duda que es,pues mi experiencia de relación con los demás me hace constatarlo.


En algúno de los artículos que me enviaste escribiste "Jesús es el que acontece cuando Dios habla sin obstaculos en un hombre" (J. Sulivan)

Yo agregaría que Jesús es el idioma de Dios que yo puedo entender, en el que yo hablo.

Pero si entiendo a Jesús como idioma, palábra, Jeús es una manera de experimentar o relacionarme con Dios.

Yyo también experimento a Dios en la creación, en el amor, en la ternura.

Y lo encuentro en mi hermano, en su espíritu, en mí espíritu, en el espíritu trascendente de aquellos que se han ido de este mundo.

Y tambíen, lo encuentro en la perfección de un bebé que sin palabras es presencia completa de Dios en sus 3 maneras.

No creo poder entender o contener a Dios pero estas 3 personas, maneras de Dios son lo más cercano que tengo para tratar de entender mi experiencia de Dios en la vida diaria y se que Dios no se entiende, se vivePor lo que voy de la mano de Dios , del imposible a la realidad que El pone a mi alcance,

Saludos Alma Jiménez 24 de febrero 2011

APORTACIÒN DE ALMA PATRICIA JIMÈNEZ DE ROJÌ SOBRE CAPÌTULO 9

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Cápitulo 9 del Libro de Lenaers
Igual en eternidad, sabiduría y poder
Controversia Trinitaria.

Empiezo por decir que las palabras no son suficientes para describir experiencias y menos para entenderlas sin vivirlas.

El autor recalca que de ninguna manera quiere dañar la fe en Jesucristo, Alfa y Omega y dice unas palabras que me llegaron muy adentro "Jesús es la manera humana como el Dios Trascendente se vuelve visible", sacando del Evangelio "Quien me ve, ve al Padre".

Yo recato de estas frases la palabra "manera" y con ella trato de expresar mi forma de ver.

Dios es uno, la Santísima Trinidad son tres "maneras" de experimentar a Dios, por lo tanto, igual en eternidad, sabiduría y poder.

Maneras: Dios creador, Dios con nosotros, Dios Espíritu iluminador.

Para tener una experiencia de Dios necesito aceptar en 3 maneras (mínimo)a Dios en igualdad de importancia.

Teniendo en cuenta que experimentar cada manera me hace ser un mejor ser humano y más completo, porque yo estoy formada a imagen y semejanza de Dios en mí también existen maneras de ser aún cuando sea una persona.

Primero debo estar conciente de que existo, que soy un ser humano creado y que el espíritu que habita en mí es trascendente.

martes, 22 de febrero de 2011

PARTICIPACIÓN DE GUSTAVO GÓMEZ AL CAPÍTULO X

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Una pirámide invertida
La «Santísima Virgen y Madre de Dios María»

Reflexiones personales de Gustavo Gómez
Como inicio quisiera resaltar que las presentes reflexiones las plasmo en papel una vez comentadas en forma verbal ante mis compañeros en la sesión del día 09 de noviembre de 2009, y por tanto han sido enriquecidas con sus valiosos comentarios y participaciones, mismos que incluyo en diferentes ocasiones a lo largo de los siguientes párrafos.

El tema a revisión y análisis, conlleva en sí mismo revisar el lugar que a lo largo de la historia en los últimos dos mil años se le ha dado a la mujer en el ámbito de la Fe, de la Religión y en sí mismo, dentro de la iglesia.

Uno de los aspectos que me viene a la cabeza al leer el capítulo 10 del Libro de Lenaers, es cómo a lo largo de la historia de la Iglesia, ésta no ha sabido qué hacer con la presencia de la mujer, y pareciera que ha querido alejarla, olvidarla, ignorarla, vejarla, pisotearla, etc., etc., etc., y relegarla finalmente a una sola misión en la vida, que es la procreación de la especie.

Que acción tan corta, miope, baja y ruin de la Iglesia para con la mujer, para con un poco más de la mitad de la población que existe sobre este planeta. Pareciera que gritan a voz sonora, “la religión es para los hombres”, las mujeres no importan.

Una explicación racional no la encuentro, ya que de racional no tiene nada esta actitud tan mezquina de la Iglesia.

Los dogmas, mitos y ritos de la Iglesia están llenos de contradicciones, y para muestra basta solo un botón.

No obstante que uno de los sacramentos de la Iglesia es el matrimonio, y por tanto está consagrado por DIOS, tiempo después y una vez consumada la vida marital, viene felizmente el nacimiento de un bebé, por lo que poco tiempo después lo llevamos a bautizar, y lo primero que nos dice el cura es que le vamos a quitar el pecado original.

Quién los entiende, primero te dan los sacramentos desde el bautizo, confirmación, primera comunión, confirmación y matrimonio, y por tanto ya puedes tener vida marital y realizar la procreación con la bendición de DIOS. Pero resulta que vives en el pecado, porque el producto del amor de la pareja debe de lavarse en el bautismo y retirarle el pecado original. ¡Qué absurdo!

Por otro lado, quisiera entender la actitud de la iglesia, visto desde afuera hacia adentro de la misma.

Algunas reflexiones estrictamente personales me animan a señalar que estas actitudes no son el resultado de diversos análisis de conciencia hacia el interior de la iglesia, sino más bien son el triste reflejo de lo que al interior de la misma acontece.

¿Qué acontece al interior de la misma?, pues tenemos a una iglesia encerrada en sí misma, con dogmas, mitos y ritos de hace dos milenios, con lenguajes obtusos, creyéndose los dueños de la palabra de dios, y a la vez los únicos transmisores de la misma, dueños de la verdad, con una incapacidad total para hablar sobre sexualidad, la cual por cierto, es un tema importantísimo en la sociedad actual, y para rematar, con ministros célibes, entre otros.

Como podrían estos personajes con tantas y tantas “virtudes”, darle su verdadero lugar a la mujer a lo largo de la historia. Respuesta: Imposible

Como esperar respuesta a tu iniciativa de diálogo, a tus peticiones, razonamientos y planteamientos razonados y razonables, si para empezar no te escuchan, si son dueños de la verdad y de la palabra de Dios. Es solo un monologo disfrazado de dialogo. El camino es el dialogo, no el enclaustramiento de la palabra y la razón.

Ahora entremos al tema de María tomando en consideración lo ya señalado con anterioridad.

Como esperar que María tenga un lugar digno, y que esté íntimamente ligado a su importancia, si la mujer no tiene prácticamente valor para la curia eclesiástica.

Sin embargo y tal como lo establece Lenaers en el artículo, a María se la ha vivido como el complemento femenino del Dios-Padre, a quien se lo siente masculino, estricto y generador de angustia. Sin duda que esta imagen es una deformación de la verdadera imagen cristiana de Dios y ciertamente eso no viene del espíritu de Dios, sino que es el fruto de una estrechez comprensible y perdonable de la psiquis humana. La huida colectiva de la piedad popular hacia María se decantó pronto en la liturgia, y no sólo en la católica romana.

Asimismo, Lenaers no dice que María pareciera ser tributaria de un elemento estructural de la Iglesia: es decir que ella, desde hace más de 15 siglos está siendo administrada por hombres célibes que tienen una necesidad, al menos inconsciente, de tener un objeto femenino al que venerar. Pero el celibato levanta una barrera frente a la mujer de carne y hueso, no así frente a una que mora en los cielos. La feminidad sublimada que se encontró en la «Virgen María» que vino a colmar ese vacío sin dejar rastros ni sentimientos de culpa. Su veneración podría incluso dar la impresión de estar levantando al alma hacia las alturas santas.

Es así que a lo largo de 15 siglos se venera a María, sin embargo y para variar, coloca la Iglesia a María, muy pero muy lejos de la mujer terrenal, ya que le concede una serie de “atributos”, tales como la madre de dios, concepción virginal de Jesús y la extensión virginal en el parto y post-parto, concepción inmaculada y finalmente su asunción «en cuerpo y alma» a los cielos.

Que mujer puede siquiera acercarse a ser como María, ya que es inalcanzable y sobre todo está muy lejana a cualquier mujer sobre la tierra.

La propuesta de Lenaers al respecto es muy sana, pero sobre todo nos permite ver en María a una mujer terrenal cuya mayor virtud es haber procreado junto con José, al ser mas excepcional que ha pisado la tierra, y como dijera Amalín, que virtudes tendrían los dos como padres y sobre todo que clase de pareja serían para haberle entregado al mundo a este ser humano de excepción.

Tenemos en este punto un filón de oro que tenemos que revisar en un futuro, para al menos darnos una idea sobre la humanidad de María y José como personas y como pareja. En ese entonces ni pensar en Desarrollo Humano u otras herramientas para el crecimiento personal; entonces la pregunta sería, ¿Cómo le hicieron?

¡O es como dice la Iglesia, fue por obra del Espíritu Santo!

Para cerrar mi reflexión, quisiera reafirmar lo señalado en mis comentarios a Capítulos anteriores, el Cristianismo debe de pavimentar el camino de Fé para ir hacia EL.

El Cristianismo debe llenar las aspiraciones del mundo de hoy, para entregarnos libertad, paz, alegría por la vida, amor, plenitud, felicidad, trascendencia, comunicación, sensibilidad, etc; todo aquello que no se encuentra a la vuelta de la esquina, sino todo aquello que solo encontramos en DIOS.

Ya que esto no es así, estamos en el proceso de apertura de nuestro propio camino de Fe en comunidad y lo estamos trazando más recto y con una meta perfectamente definida, la cual puede observarse desde el punto de partida.

¡Y que la Iglesia continúe entregando solo misas los domingos!

APORTACIÓN DE LOURDES ADÁN AL CAPÍTULO 10

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Comentarios al Capítulo X. Una pirámide invertida.

La “Santísima Virgen y Madre de Dios, María”

Pienso, como Lenaers, que es verdad que todos los títulos que se le han ido dando a María, desde Efeso (430 d. C.), el de “Teotokos” (Madre de Dios), hasta el último dogma mariano de 1950, la “Asunción a los cielos por los ángeles”, y pasando por los títulos de “Virgen antes, durante y después del parto” y el de la “Inmaculada Concepción”, han surgido de una base bíblica débil, puesto que muy poco se habla de María en los Evangelios. Todos estos títulos y dogmas la han alejado tanto del resto de los mortales, que se ha visto siempre a María como una persona especial e inalcansable. Sin embargo, para la jerarquía es un modelo de mujer a su alcance, a pesar del celibato, o tal vez por eso mismo, y una mujer “esclava de Dios”, a sus ojos machistas.

Además de lo anterior, debemos siempre tomar en cuenta las circunstancias históricas en las que todos estos dogmas o títulos marianos han surgido y de las que nos habla con toda claridad Lenaers, para tener un criterio más claro y más real de la figura de María en la Biblia y en nuestra devoción y veneración hacia ella.

Pienso que, más allá de todo título y de todo pensamiento romano hacia la Madre de Jesús, lo que hace a María excepcional y digna de veneración es el hecho, en primer lugar, de haber llevado en su seno a Jesús, nuestro Jesús, nuestro amado Jesús, y, que, sin duda, fue una madre excepcional y especialísima por habernos dado tal hijo. Sin duda una madre y una esposa llena de ternura y de sabiduría para criar y tener una familia capaz de haber hecho de Jesús un hombre libre y liberador, compasivo y valiente.

Puedo imaginarme a María como una mujer fuerte para resistir momentos difíciles y con un corazón compasivo para ver en los otros sus necesidades y sufrimientos y ser capaz de compartir su vida y su amor con los más necesitados. Puedo imaginarme a María siendo una esposa amorosa capaz de cooperar con José en sus esfuerzos por ser un padre y un esposo bueno; puedo imaginármela piadosa y sencilla ante Dios, pero de enorme talla e intransigente ante las injusticias y abusos de los poderosos y de los que se decían líderes religiosos; puedo imaginármela capaz de luchar por la dignidad de los menospreciados y discriminados; puedo imaginármela compartiendo sus propios pocos bienes con los más necesitados; puedo imaginármela luchando por construir una sociedad más justa y más equitativa; puedo imaginármela, en fin, como una mujer valiente y decidida para enfrentarse a todo lo que a sus ojos era injusto y recriminable y enseñando a Jesús desde pequeño, a tener los sentimientos y las actitudes de una corazón generoso, solidario y compasivo.

Por todo esto, porque fue una mujer tan humana como yo, y por seguramente mucho más que vivió y compartíó María con José y con Jesús, es para mí, muy digna de veneración, respeto y profunda admiración.

UNA EXPERIENCIA PERSONAL RELACIONADA CON EL CAPÍTULO 10

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

APORTACIÓN DE ANA LAURA JIMÉNEZ CODINACH


12-Diciembre-2010

UNA EXPERIENCIA PERSONAL

Soy mexicana, en mi familia aprendí desde chica a honrar y a amar a nuestra Madre de Guadalupe, mi hermana menor nació el 12 de diciembre y fue para mis papás un mensaje de predilección por lo que le pusieron por nombre Guadalupe. Mi papá fundó un colegio en la frontera norte con Estados Unidos con el nombre nahuatl de Juan Diego, Cuauhtlatohuac. Hoy mi hermana es Doctora en Historia y yo soy teóloga, ella y yo amamos a nuestra Madre, creemos en el “milagro guadalupano” entendido como el hecho de que como mexicanos sigamos recurriendo a María en los diversos momentos de nuestra vida a pesar de las influencias de diversas sectas que provienen de Estados Unidos que no creen en ella, a pesar de las grandes injusticias que se han promovido por nuestro gobierno y las clases dominantes, a pesar de nuestra falta de testimonio como cristianos, a pesar de una iglesia que no siempre ha comprendido los sufrimientos especialmente de las familias y que no les ha reconocido su derecho a crecer adultamente en su fe, pero no creemos ni en las apariciones ni en Juan Diego, más bien creemos que unas y otro son un símbolo. Juan Diego lo vemos como el símbolo creado no por el pueblo indígena - muchos de ellos no se identifican con él- sino por quien le interesa crear un perfil del creyente sencillo, sufrido, sin conciencia crítica, manipulable, sumiso totalmente a una jerarquía que con frecuencia no le da su lugar a la mujer, a la esposa, a la madre, pero sí pretende que se puede sustituir el rol único de una madre humana con la maternidad de María que responde a otra dimensión.

Por otra parte, es importante considerar que lo que celebramos los mexicanos oficialmente, es decir, las apariciones de María al indio Juan Diego, no pasa el rigor histórico. Una tradición piadosa, un relato literario no es prueba de existencia histórica. Un personaje literario no tiene existencia física. Los historiadores sabemos que el relato guadalupano es una MARIOFANIA como hay muchísimas en la historia de la Iglesia. Sólo en España hay unas 22 000 mariofanías, es decir, relatos sobre alguna devoción mariana, por ejemplo la de la Virgen del Pilar, Montserrat, la Macarena, etc. Casi todas se refieren a un hecho milagroso: la Virgen de Guadalupe de Extremadura, España, fue rescatadas por un campesino Juan, que oyó música, vio luces y colores en el campo donde la Virgen estaba enterrada, según la tradición, la imagen de madera fue tallada por San Lucas.

Todos los pueblos buscamos tener una identidad que nos distinga de otros. Y qué mejor que ser “pueblo elegido” como Israel de Cristo o México de la Santísima Virgen.

El relato de las “apariciones guadalupanas” más antiguo NO es del siglo XVI. Hoy se sabe que es del siglo XVII. Es el NICAN MOPOHUA (l649) escrito en un “nahuatl eclesiástico” que aún no existía en l531. Hay una serie de cuestiones alrededor de esta tradición que presentan problemas que la crítica interna y el rigor histórico plantean.

NO SE NIEGA LA EXISTENCIA DEL CULTO GUADALUPANO, DE LA FE DE TODO UN PUEBLO, AL CONTRARIO, ALLI ESTA EL MILAGRO. Pero no hay que confundir el amor a Nuestra Señora de Guadalupe con la existencia física de un vidente. Las apariciones de la Virgen, de Cristo o de algún santo, NO SON DOGMAS DE FE. Canonizar equivocadamente a un personaje literario no es dogma, por lo tanto, no está en cuestión la infalibilidad del Papa.

Yo sugeriría que hiciéramos hincapié en EL AMOR DE LOS MEXICANOS PR LA SANTISIMA VIRGEN, EN LO HERMOSO Y PROFUNDO DEL RELATO GUADALUPANO, EN EL MENSAJE DE AMOR QUE EXPRESA, pero que no insistamos, sin prueba auténtica, en la necesidad de apariciones, de una tilma milagrosa pintada por ángeles o por Dios (que no lo es pues tiene varios defectos y ha sido repintada o borrada en partes) y en un vidente físico.

JUAN DIEGO ES UN SIMBOLO EN EL RELATO GUADALUPANO DE UN PUEBLO QUE ACEPTA A MARIA COMO SU MADRE.

En México urge un proceso evangelizador acorde con la modernidad, creo que todos los beneficios que puede traer a la Iglesia el que se le de su lugar, por lo menos en alguna forma, a los indígenas, NO JUSTIFICA el que se declare que es históricamente cierto algo que NO es, o por lo menos que no existen pruebas para decir que es. A los historiadores les corresponde decirnos, para eso están preparados, (entre éstos hay también sacerdotes connotados) si ese acontecimiento fue histórico y muchos de ellos nos dicen que no hay pruebas que lo confirmen, que están de acuerdo en que Juan Diego ha sido un símbolo y que ha habido ciertamente un MILAGRO GUADALUPANO.

De acuerdo con el magisterio de la Iglesia, para que pueda considerarse un hecho como milagro debe ser un acontecimiento exterior, que lo puedan captar los sentidos, que sea histórico, y que quien o quienes lo realizan sean personas históricas, ES DECIR, QUE SE PUEDA PROBAR SU EXISTENCIA HISTORICAMENTE. También es requisito el que a pesar de la existencia histórica de los protagonistas, el hecho no se pueda refutar ni probar por las ciencias humanas, es decir, y que a la vez no constituya un rompimiento de las leyes establecidas por Dios para la existencia del universo, lo cual sería una incongruencia para una persona de fe. Finalmente es un requisito esencial que el contenido del hecho tenga relación directa con el Mensaje Cristiano, que tenga relación con el amor que Dios nos tiene y con su mensaje de salvación.

Esto significa que sí hay milagros pero éstos no son los que generalmente hemos creído que son milagros. Los milagros son muy raros y sin embargo vivimos a diario muchos milagros. EL MENSAJE CRISTIANO, LA COMUNIDAD DE FE y LAS CONDUCTAS QUE SE REALIZAN POR AMOR son verdaderos milagros: se registran en la historia, tienen que ver con el mensaje salvífico que Dios nos envía y no se pueden probar ni refutar por las ciencias humanas, obviamente tampoco constituyen una violación a las leyes del universo.

EL MILAGRO GUADALUPANO, COMO LA GENERACION DE TODA UNA COMUNIDAD DE FE alrededor de la PALABRA DE DIOS CONTENIDA EN EL MENSAJE CRISTIANO EN EL QUE SE ENMARCA EL MENSAJE DE MARIA, sí es manifiesto y registrado en la realidad sensible, lo constituyen todas las conductas de nuestro pueblo creyente alrededor de la devoción a la Sma. Virgen, en su advocación de Guadalupe, y no se pueden explicar ni refutar por las ciencias humanas, tampoco constituye una violación a las leyes del universo.

El MILAGRO GUADALUPANO PUES, CAE DENTRO DE LA CATEGORIA DE MILAGROS QUE LA TEOLOGIA FUNDAMENTAL RECONOCE. Pero la existencia del indio Juan Diego si se le quiere considerar vidente y protagonista de un hecho milagroso, DEBE PRIMERO PODERSE PROBAR.

La existencia histórica de un vidente se debe probar pero las apariciones NUNCA SE PODRAN PROBAR pues son eventos espirituales que no se registran en la historia, aún en el caso de considerarse reales. LA IGLESIA NUNCA HA CONSIDERADO LAS APARICIONES COMO DOGMA DE FE, POR LO TANTO QUIEN NO LAS CREE NO PODRA POR TAL MOTIVO SENTIRSE FUERA DE LA FE DE LA IGLESIA.

Lo que considero más delicado del hecho de seguir enfatizando el fundamento histórico de toda la tradición guadalupana, es que tales afirmaciones van directamente contra la credibilidad de los decretos que ha hecho la Iglesia en nombre de la fe. La fe no se prueba sino por la fe misma, pero en el caso de los milagros la fe se subordina a la prueba histórica de la existencia de quienes los realizaron. Nuestra fe adulta exige que se respete a las ciencias humanas en aquello que corresponde a ellas y exige también que la iglesia nos informe la verdad.

Es más, el hecho mismo de la exigencia de los milagros para poder considerar a una persona santa nos parece algo innecesario sino es que absurdo, ya que la razón de ser de elevar a una persona a los altares es que pueda ser un modelo de vida, que sus virtudes se puedan imitar y no que haya roto las leyes de la naturaleza actuando en forma extraordinaria como es el hecho del “milagro” adjudicado a Juan Diego como último requisito. Tener fe es precisamente creer lo que no vemos, cuando la fe necesita de ver es que NO ES FE. Así que a pesar de los beneficios sociales que pueda traer esta canonización, lo que se perjudica es la base del mensaje cristiano y la fidelidad de la Iglesia como institución a aquello que ella misma ha dicho que constituye el milagro.

Por otro lado, el apoyo social que necesitan los indígenas por parte de la Iglesia es principalmente el que les podemos dar a los indígenas vivos, respetándoles su dignidad como mexicanos y como cristianos y promoviendo su crecimiento.

Yo creo que la forma en que la Iglesia oficial celebra la fiesta de Sta. María de Guadalupe nos afecta a todos como cristianos, como católicos mexicanos, y posiblemente más a los que son historiadores creyentes o a los que somos teólogos y hemos tomado en serio eso de que la teología tiene hoy más que nunca la tarea de purificar la fe, es decir, ir descubriendo lo que realmente es motivo de fe y lo que no lo es.

Como símbolo, como metáfora, como mito, (que no significa que sea mentira) el relato guadalupano puede ser algo y de hecho lo ha sido, providencial para un pueblo al que le faltaba tener algo de qué sentirse orgulloso, pero lo que no estoy de acuerdo, y conmigo muchos estudiosos de la teología, es que la iglesia con su autoridad que ante el pueblo es infalible, diga QUE ES lo que no le corresponde a ella probar y que aquellos a los que sí les corresponde, digan que NO ES o por lo menos que no tienen las pruebas suficientes para decir que es.

Creo también que hoy es urgente rescatar la figura de la María, Madre de Dios y Madre nuestra, rescatarla en nuestra vida diaria, con una fe adulta, verla como alguien que a la cabeza de todos, supo aprovechar lo que Jesús ha hecho por todos nosotros e imitarla y amarla como alguien muy cercano a nosotros, digna de tomarse en cuenta en nuestras diarias decisiones por sus ACTITUDES DE VIDA hoy tan requeridas: su fe, su valentía, su disponibilidad a la voluntad de Dios, su libertad, su actitud de servicio, su búsqueda y su cuestionamiento que no se opusieron a su fe, en fin, muchísimas cosas…

Pero no decir de ella lo que ella no dijo, aunque sea muy bonito y nos suene muy confortador, lo que ella ha hecho en México lo ha hecho en muchas otras partes, para todos indígenas o españoles, pobres o ricos, morenos o blancos. Ella es nuestra Madre y está interesada en hacernos sentir su amor precisamente cuando sufrimos, cuando nos sentimos solos y no tomados en cuenta, cuando otros nos quieren dominar, ella quiere que descubramos el amor que su Hijo nos tiene, por supuesto que sí, pero precisamente lo quiere hacer a través de nosotros, como destinatarios pero también como instrumentos o mensajeros.

A mí, por lo pronto, me gusta pensar como Theilard de Chardin: creo, no por los milagros, sino a pesar de ellos…

Cuernavaca, Morelos, diciembre 12 de 2010.

APORTACIÓN DE ANA LAURA JIMÉNEZ C. AL CAPÍTULO 10

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Creo que la Mariología, o sea la doctrina de la Iglesia sore Marìa, no fué elaborada por mujeres, sino por varones que no estaban casados, por individuos que no tenían relación alguna con el matrimonio, por personas que han creído que su propio estado célibe es de mayor valor que el matrimonio. Sin embargo María fue una mujer casada y parió un hijo. Pero aceptar eso, tal como lo encontramos en las Escrituras, significaría que María llevó una vida ajena al celibato, incluso contraria a el. De ahí que fué preciso reformar la imagen de María que presenta el Nuevo Testamento. Le quitaron el parto del único hijo que le reconocieron, ella no podía dar a luz como las mujeres traen sus hijos al mundo, pues ello habría dañado su “virginidad en el parto” y consiguientemente su “virginidad perpetua”. Para los que elaboraron esta doctrina, el himen de María no se rompió durante el parto, de lo contrario ella estaría tan dañada y mutilada como las demás mujeres que tienen hijos. Así se le ha privado de algo decisivo como mujer y consiguientemente, como ser humano, así a la madre se le priva de su maternidad creyendo con ello excluirla de la maldición que, según los celibatarios, pesa sobre la maternidad normal de las mujeres normales y que es resultado de la maldición del pecado original. . Pero esta maldición es sólo una fantasía neurótico-sexual.



Los celibatarios quisieron pintar una imagen de María que no tuviera nada en común con el retrato de otras mujeres, y ciertamente lo consiguiron, pero con ello desfiguraron un rostro humano hasta hacerlo irreconocible. Es posible que la veneración de una sola mujer pura, frente a todas las otras impuras y en contraste con ellas, pueda servir de ayuda a una existencia celibataria desierta de mujeres, para la que esa ausencia significa con frecuencia una parte de la soledad humana, pero es absolutamente indudable que los celibatarios han causado daños a otras muchas personas con esa pintura. Tal vez haya personas con nostalgia de la imagen de una Reina del cielo, pero es inmensamente mayor el número de las que ansían una persona con formato humano. Cuántos habrían podido encontrar en una representación de María menos milagrosa, pero más verídica, la imagen de una persona verdadera , a éstos se les privó de la posibilidad de tal encuentro al ofrecerles la doctrina de un portento natural incomprensible y, por tanto, carente de significado para la vida real. A causa de ese déficit en la mariología, se imposibilita al cristiano vivir la fe en la medida en que María tiene que ser para él un modelo concreto para su fe. ¿Còmo podrá reconocerse en María una mujer si se canta a María en la letanìa lauretana como la “mater inviolata”? Esto significa que todas las demás madres han sido “violatas” o sea que han padecido violencia.



Ya es hora de que en la teología católica la mariología, que ha estado patas para arriba durante demasiado tiempo, vuelva a encontrar su postura natural. Perdió su postura normal porque se convirtió muy pronto en una teología de varones, incluso celibataria. De ese modo, las deformaciones masculinas del mundo y de sus valores ocuparon en la mariología un espacio determinante. La mariología tradicional no merece el nombre de tal ya que se convirtió en una especie de antimariología, pues aunque se proponía exaltar la grandeza y dignidad de una mujer y pintarla con trazos de ciencia teológica tras un fondo dorado, en realidad se ha desfigurado con dedos toscos lo específico de la dinidad femenina, tanto en María como en todas las mujeres.

APORTACIÓN DE ELISA ZEAVERT AL CAPÍTULO X

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

MARIA MADRE DE JESUS


ALABA TODO MI SER LA GRANDEZA DEL SEÑOR Y MI ESPIRITU SE LLENA DE GOZO…..

Esta frase, me invoca a esta gran mujer, llena del Espíritu de Dios, ella fue elegida para ser la Madre de Jesús, Dios, la amó siempre, por la grandeza de su ser, por su disponibilidad, humildad, sencillez, espiritualidad, de quien sino, Jesús iba a tomar todo su carisma humano.

En relación a la concepción de Jesús., siempre he pensado en la maravilla que es la creación del ser humano, y la posibilidad de la mujer de ser cocreadora con Dios en dar a luz….es maravilloso, y en que momento Dios le iba a quitar esta experiencia tan hermosa como el concebir por amor….me imagino, que en esta concepción se involucró todo el ser de MARIA como el de JOSE., las escrituras hablan de la descendencia de Jesús de la Casa de David, y José era de la Casa de David, nunca me quedó claro esta descendencia…..

Vuelvo a recordar lo que en capítulos anteriores sobre el énfasis en el lenguaje, en las palabras y los acontecimientos en la Vida de Jesús, cuando el mensaje que Dios nos envia es de Amor y de Vida, y de cómo descubrir la Fuente de Su Amor para conectarnos como lo hizo Maria, José y Jesús..

Yo venero a la Virgen María desde pequeña, le he encomendado a todos los que amo, he sentido su Presencia en los momentos alegres y tristes, porque, como mujer siento que ella entiende mi condición, es verdad es la imagen de ternura preocupación intercesión, ella cuidó con amor de Jesús, y lo conoce en su parte humana, por ello, muchas veces me dirijo a ella en su papel de mediadora….

Ella me ha enseñado con sus actitudes, humildad y su sencillez, a seguir la Voluntad de Dios,.y el sufrimiento que como madre vivió al lado de Jesús en la cruz.

Si creo que así como el MAGNIFICAT expresa un ser lleno de la Gracia de Dios así ella, lleno todo su Ser de la Luz de Dios.

Ya es hora de ver la grandiosidad de su ser sin tantas vestimentas…¡

APORTACIÓN A LOS ESCRITOS ENVIADOS... DE ELISA ZEAVERT

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Comentarios de los escritos enviados.


Estos escritos, me han ayudado a entender, que los tiempos que estamos viviendo van un marcar un nuevo periodo dentro de nuestro historia, Esta nueva ola como nos dice “Alvin Toffler” se da como un proceso de cambio, que poco a poco se manifiesta, primero en la sociedades industriales de conocimiento, que están marcando características muy claras de esta nueva era, que yo los ubico como síntomas, como es la violencia, el abuso de las drogas, la falta de un significado de la existencia, las crisis económicas, marcadas por el poder económico de unos cuantos, la individualidad, etc… Todos nos damos cuenta, que si esta situación prevalece el mundo no podrá subsistir, pero también, vemos una parte luminosa, con las jóvenes generaciones, que en búsqueda de soluciones, encuentran nuevos retos y desafíos, que nos hacen ver, que no estamos solos.y que los cambios ya se están dando,,, miles de personas se comunican en la red social, proponiendo nuevas formas de relacionarnos, de humanizarnos….Pero qué pasa con nuestro país, cuya religión siempre ha sido un aspecto importante en su vida, las costumbres, las tradiciones, los ritos de muchos poblados, no pueden cambiar de la noche a la mañana, El marco de referencia que dio origen a muchos de nuestros comportamientos, nos lleva a observar, escuchar, analizar lo que está pasando dentro y fuera de nosotros….la nueva Teología nos da nuevos paradigmas, que nos llevan a cambios de muchas conductas y costumbres que nos sacan de nuestra comodidad, y nos viene un sentimiento de inestabilidad ante los cambios que se dan de una manera acelerada… Tengo muchas costumbres arraigadas, y que de una manera u otra, que son parte de mi historia, de la educación, cultura, el deber de asistir los domingos a misa, el de la búsqueda de los sacramentos el bautizo, primera comunión confirmación matrimonio…. Preocupados por que se celebren estos ritos…a veces, han perdido el verdadero significado, pues lo que menos importa es la Fe. La cultura mexicana, es conservadora, es tradicionalista, y cae en ritos que se van heredando de padres a hijos, que se hacen en función de conservar la tradición familiar, las jóvenes generaciones, que son más congruentes con su manera de pensar, no las siguen, no le ven el sentido, y poco a poco se han ido perdiendo. La religión debe dejar de ser un rito, una tradición, una costumbre, debe ocupar el centro de la vida del ser humano, en la búsqueda de significados profundos que lo lleven a humanizar el mundo que lo rodea.

domingo, 13 de febrero de 2011

APORTACIÒN AL CAPÌTULO IX DE ANA LAURA J IMÈNEZ C.

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

El capítulo 9 nos ha introducido más profundamente que cualquier otro del libro en lo que se ha llamado “el misterio fundante de nuestra fe”, es decir el misterio trinitario, a mí este capítulo me ha parecido apasionante, valiente y purificador de mitos que se habían venido incrustando precisamente en el corazón mismo de nuestra fe. Tuve la fortuna de estudiar aquí en México, la Teología Fundamental con el P. Peter Knauer, S. J., conocido teólogo alemán que durante 27 años fue profesor de esta materia en la Universidad Jesuita de Sankt Georgen, en Frankfurt am Main, Alemania. En el centro de la obra de este teólogo se desarrolla una ontología relacional con la que reemplaza la tradicional ontología de substancia griega. El resultado de este viraje ontológico es una novedosa teología fundamental ecuménica, que permite la reinterpretación de la fe cristiana y de su contenido dogmático. El P. Knauer define la fe como “la comunión con Dios en la comunión entre nosotros”.




Knauer cambia el presupuesto filosófico fundamental de una ontología de substancia por una ontología relacional, según la cual, LA RELACIÓN CONSTITUYE LA SUBSTANCIA DE TODO LO CREADO. El universo es, en su propia realidad, «total relación a ... / en total distinción de ...». ¿A qué somos relacionados? A una realidad que sólo puede definirse diciendo que nada podría existir sin ella. Esta realidad la llamamos «Dios». Dios es «sin quien nada existe». . Sólo hablamos verdaderamente de Dios cuando reconocemos que le debemos todo nuestro ser. Ser creado es como una relación subsistente, es decir, una relación que no se añade a un sujeto, sino que es idéntica con su sujeto y lo constituye.



Sin embargo, Knauer nos hace ver que estamos tan condicionados por la ontología griega de substancia que ingresó en el pensamiento teológico cristiano desde el siglo II, que implica mucho trabajo dejarla de lado. Esta dificultad es mayor en cuanto que el precondicionamiento filosófico suele ser inconsciente y, cuando esto es así, también suele ser incuestionable.



Para Knauer la fe consiste en el reconocimiento de que estamos acogidos en el amor de Dios, su centro consiste en que Dios se nos da a sí mismo. Su punto de partida es el encuentro con el anuncio cristiano. Este anuncio pide que se le escuche y que se le preste atención porque reclama poder liberar al ser humano del poder de aquella angustia que es la causa de todo mal en el mundo. El comprender la creación como algo totalmente referido a Dios pero totalmente diferente de, nos lleva a una ontología desacostumbrada pero indispensable par entender hoy el anuncio cristiano., no solo hay relaciones accidentes que se agreguen a su sujeto, sino que la REALIDAD CREADA ES, ELLA MISMA, UNA RELACIÓN que constituye el ser del sujeto.



El anuncio cristiano pretende ser palabra de Dios y así, relación de Dios con nosotros, esta relación consiste en que desde el principio estamos adentrados en un amor eterno de Dios. Para dar a entender nuestra comunión con Dios, el anuncio cristiano habla de la trinidad de Dios. Dice que el único Dios existe como tres modos de autopresencia diferentes entre sí y diversamente mediadas entre sí, tres modos de relacionarse Dios consigo mismo. La interrelación de estos tres modos de autopresencia de Dios, que llamamos personas, puede describirse así: el Padre es sin origen, una autopresencia originaria de la única realidad de Dios, el Hijo recibe todo lo que es o tiene del Padre y es también autopresencia de la única realidad de Dios, autopresencia que supone la primera, y . el Espíritu Santo que es el amor eterno y mutuo entre el >Padre y el Hijo es una tercera autopresencia de la única realidad e Dios, esta tercera presupone la del Padre y la del Hijo. Porque somos persona, es decir porque somos capacidad de autopresencia, de hacernos presentes a nosotros mismos, de relacionarnos con nosotros mismos, apuntamos también hacia Dios desde esa capacidad.



Hablamos de la trinidad de Dios, siempre en forma analógica, “totalmente relacionada a pero totalmente diferente de …”, para poder decir que el mundo, DESDE EL PRIMER MOMENTO DE SU EXISTENCIA, HA SIDO CREADO AL INTERIOR DEL AMOR DEL PADRE AL HIJO, el amor de Dios al mundo es EL AMOR ETERNO DEL PADRE AL HIJO Y NO DEPENDE DE CONDICIONES CREADAS. Precisamente por eso es confiable. El Padre, en nuestra oración, escucha a su propio Hijo. Orar en el nombre de Jesús significa responder a la palabra de Dios, dirigirse a Dios como a aquel de quien sabemos que su amor nos envuelve. La trinidad de Dios se llama un “misterio de fe” en el sentido de que no puede desprenderse del mundo, El mundo por tanto, no es la medida del amor de Dios al mundo, y por eso, este amor tampoco puede ser medido a partir del mundo. El hecho de que estemos adentrados en el amor del Padre al Hijo, que es el Espíritu Santo, necesita ser “AGREGADO” a nuestro mundo, y la verdad de esta palabra sólo puede ser reconocida en la fe, de la que dice el anuncio cristiano que es estar lleno del Espíritu Santo. Por todo lo anterior, el concepto del misterio de fe no tiene nada que ver con dificultades lógicas o contradicciones. Para hablar del misterio de la fe y su desdoblamiento en una serie de dogmas, nos apoyamos en una palabra que quiere darnos certeza interior. Por esto mismo es imposible que un misterio de fe sea algo incomprensible.



EN LA FE SE TRATA DE QUE HEMOS SIDO CREADOS AL INTERIOR DEL AMOR DE DIOS A DIOS, esto significa que algo creado no puede ser la medida del amor de Dios, por consiguiente, no podemos hacer nada para alcanzarlo y tampoco podemos hacer nada para evitarlo, tampoco nuestro bienestar es su medida.



De todo lo anterior yo deduzco que mi Dios es relacional, que se relaciona consigo mismo, que yo soy porque estoy relacionada a él, que El quiere que yo me relacione con él en forma consciente y que me invita a relacionarme con mis hermanos para descubrir quién soy y quién es El pero en forma experiencial.

APORTACIÒN DE MA. DE LOURDES JIMÈNEZ AL CAPÌTULO IX

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

Comentarios al Capitulo 9 del P. Leaners.

Las palabras del P. Leaners al inicio de este capitulo 9, señalando que quiere subrayar, para tranquilidad de todos los que en el capitulo 8 nos sentimos inconformes y aterrados con su contenido, que "Jesus sigue siendo para nosotros el Alfa y la Omega y que Jesus es la manera humana como el Dios trascendente se vuelve visible y que la maravillosa formula del cuarto evangelio,

Yo tampoco creo que se venga abajo el concepto del Dios Trino, por el contrario, con Jesus mas que nunca se le hace evidente al hombre que nuestro Dios es relacional, que se realiza en el hijo, por el amor del espiritu, y que en ese abrazo trinitario, existimos los hombres y participamos de Dios desde siempre, hemos sido creados en ese abrazo trinitario, independientemente de que lo aceptemos o no, por lo que el esta en nosotros y nosotros en el, solo que su presencia no es explicable en términos humanos, de ahi la belleza del MIsterio que vino a hacer evidente la encarnacion, el nacimiento, vida, muerte y resurreccion de Jesus de Nazareth, y no de cualquier otro ser humano en el que esa presencia nos corresponde como creatura de su obra y creación, por lo mismo Jesus viene a hacer esto evidente no solo para el pueblo de Israel al que Él histórica y humanamente pertenece, sino a toda la humanidad anterior o posterior al milagro fundante que es Jesucristo.

Concedo que la doctrina trinitaria del magisterio de la Iglesia, es un laberinto imposible de clarificar, sin embargo para las generaciones de los Concilios de Nicea, Calcedonia y Trento fueron palabras humanas que lograron apaciguar el deseo racional de comprender lo incomprensible, pero que por muchos siglos fué lo que prevaleció en la vida de la Iglesia, y que sin lugar a dudas la fortaleció y mantuvo unida.. No olvidemos que el afán racionalizante es algo que traemos con nosotros en la cultura occidental como un DNA de nuestro ser, sin embargo, la grandeza de Dios, el Misterio que es la realidad divina en su forma relacional o trina, es algo que hoy prevalece sobre la explicación racional, es algo que los cristianos tenemos que saber comunicar y compartir con los demás, para lo cual no es importante o necesario describir a Dios y su paso por la tierra a través de Jesus de Nazareth, sino que es suficiente analizar los hechos de la vida de Jesus, conocer las viviencias de sus apostoles y de las primeras generaciones de cristianos para poder revivir, que no comprender, porque es que con Jesus se le hace al hombre claro esa participación divina que todos tenemos con Dios y como esa relación existe desde el primer día de nuestra existencia hasta el el ultimo en que nos refundimos en el.

Por ultimo no estoy de acuerdo con Leaners cuando dice que "Mas allá de este texto de confesión de fe, el Espíritu ocupa un lugar muy pequeño en la vida de la fe de los cristianos", pienso que mas bien con excepción de la Confesión de Fe y de la persinación de Dios en la forma que aun lo seguimos haciendo, son formulas de la Iglesia y su magisterio en el que resaltan la presencia del espiríitu, mientras que en la vida del cristiano cotidiana, lo que más se deja sentir, que no ver o razonar, es ese Espíritu vivo en nuestros corazones, que parece que está dirigiendo y protegiendo u orientando nuestra vida".

APORTACIÒN DE MA. DE LOURDES JIMÈNEZ C. AL CAPÌTULO 8, 2a. parte.

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)
2a parte de los comentarios al capitulo 8o del Libro del P. Leaners:

Dice Leaners en el capitulo 8o de su libro, que "es de admirar la tozudez con que durante varios decenios, los teologos de entonces trataron de reconciliar el monoteismo judío con el politeismo helenistico!" y, añade, que la "Ciencia historica moderna y la critica bíblica han puesto en claro la relatividad de esos resultados, claridad que no explica ni esclarece sino que meramente afirma sin fundamentar".

Pienso que la generalidad de esos teologos que tienen que defender y explicar su fe, su viviencia de Dios que ha transformado al mundo que conoció a Jesus y su testimonio de vida, es precisamente lograr encontrar en el laberinto del lenguaje humano, una explicación plausible del ser de Jesús a un mundo que, más que moverse por la experiencia vivencial, se quiere dar una explicación por la mente y racional, y así, tomando de uno y de otro mundo Nicea define el primer credo que pronuncia solemnemente la divinidad deJesus y que es la forma racional de confirmar lo que los primeros cristianos y contemporáneos de Cristo, vivenciaron con su paso y que transformó sus vidas para lanzarce al envio y tratar de compartir la forma en que Jesus transformo sus vidas y los hizo mejores y mas satisfechos, mas plenos seres humanos en hermandad con otros seres humanos.

Creo que si no sustentamos nuestra fe en esta vivencia del encuentro de Dios Padre en Cristo su hijo, por el espíritu entre los tres, no hemos acabado de aquilatar el milagro transformador del mundo que es Jesus de Nazaret, y su división de la histórica humana en dos eras, una anterior a su presencia, y la nueva era, la era del Reino de Dios entre nosotros, que vino a ser realidad Jesus, el Emanuel, el Dios entre nosotros y como nosotros.
Estoy de acuerdo con Leaners, en que la comunidad cristiana trató de expresar razonablemente aquello que no entendian, que no sabìan como expresar, que superaba a las palabras, y que al hecerlo, por deficiente que nos pueda parecer hoy, logró comunicar al mundo del Imperio, inmerso en una mentalidad griega y helenista, el significado de este encuentro inefable e indecible, sanador y dador de vida que era el Jesus hist-orico, el Jesus Dios, el Dios encarnado que era Jesus-Yahve-Dios Unico y Todopoderoso.
Dice Leaners que Jesus no es Yahvé, sino una "fuente trascendente de salvación y de renovación" y que "supera todas las cosas" pero añade que "Lo esencial no es que a Jesus se le reconozca o atribuya la categoria conceptual de Dios, sino la confesión de que sustentamos nuestra esperanza de salvación absolutamente en nuestra fé en él, por que reconocemos en el el acercamiento salvador de Dios y recibimos realmente esta salvación de él". Y yo me pregunto, ¿que es esto de fuente de salvación y renovación trascendente, que supere todo lo creado, que no sea la obra de Dios y no de un mero hombre, por excepcional que sea dicho hombre" y considerando que lo que Jesus viene a encarnar es nada menos que el Dios de Israel, el Dios que es. el Sadday o Yahvé, para el pueblo judio y para Jesus hombre Judio creyente y conocedor profundo de la ley, no me queda duda, que en Jesus se encarna ese Dios de Israel, y se hace realidad el tan esperado Emanuel o Dios entre nosotros que ya anunciaba el antiguo testamento, pues la salvación tiene que ser don de Dios y no de humano alguno.

Los cristianos no podemos negar en mi opinion, que pueden ser muchos los caminos válidos y seguros de llegar a Dios, y que no es solo exclusividad del Cristiano el obtener la salvación, pero lo que también sabemos por fe y por experiencia directa es que Jesucristo es el camino y es la luz que nos lleva a la vida eterna, a la vida plena en comunión total con el Dios vivo, el único y verdadero Dios creador de todo lo existente, y nuestro padre. Luego entonces para un cristiano no solo es importante sino fundamental la certeza de que Jesus es Dios, es el Dios Trino encarnado y ubicado en un momento de la historia humana, para venir a enseñarnos el camino de salvación.

miércoles, 9 de febrero de 2011

APORTACIÒN DE ELISA ZEEVAERT SOBRE LA NUEVA VISIÒN PLANETARIA

"EL CRISTIANO NO HACE EL DIÁLOGO, ES EL DIÁLOGO EL QUE HACE AL CRISTIANO". (Paulo VI)

REFLEXIONES SOBRE LA NUEVA VISION PLANETARIA.
La Nueva Era que nos ha tocado vivir, trae consigo una abundancia de pensamientos, comentarios y reflexiones, sobre los cambios que se están dando. Hay un libro, que siempre vuelvo a abrir, y es el de Alvin Toffler, “ La Tercera Ola”,no cabe duda, que los cambios se están dando con mucha rapidez, y contando con todas las herramientas tecnológicas que ofrece el Internet, hoy podemos conocer información que nunca antes pensado se podía compartir con otras culturas..

Las redes sociales nos acercan no sólo en el espacio, también en edades, hemos brincado muchas barreras, ..todos estos escritos y reflexiones, comparten un enfoque claro: el creciente deseo de vivir una experiencia espiritual donde los seres encontremos los significados profundos, que los esquemas actuales no nos han podido dar.

En lo personal ,siento lo difícil que son los cambios, muchas veces, los retos que la vida nos trae, dan miedo, nos hacen perder la estabilidad y la permanencia tan anhelada, sin embargo, sólo podemos crecer, si dejamos las cosas infantiles atrás.

El otro día contemplando las costumbres de nuestra cultura mexicana en relación al 2 de febrero, día de la Candelaria, muchos fieles conmemoran vistiendo al niño Jesús de futbolista,,,de lo que quieren sanar en vidas,,etc, nos damos cuenta, que las tradiciones llenan un vacío en el corazón de tantas personas, que sólo les ha quedado esta Fe, pero también de alguna manera, también ellos están llenando su esperanza otras religiones fuera de la católica..

Buscamos la seguridad , la estabilidad, la permanencia, quién en este mundo nos las puede dar, sólo AQUEL QUE ES UNICA REALIDAD INALTERABLE, DIOS

“NADA TE TURBE NADA TE ESPANTE, DIOS NO SE MUDA…

La Creación no es un evento terminado, estamos asistiendo al desarrollo de una conciencia global, hace algunos años, asistí a una plática de la religiosa Ishpriya Mataji,, de nacionalidad inglesa, vivió muchas años en la India al pie de los Himalayas, su tarea es lograr una vida más auténticamente cristiana y la libertad y realización de la persona, su libro “ Los Tiempos Exigen…
En esta plática, ella, nos motiva a buscar en el silencio de nuestro interior la habilidad para poder escucharnos , pues para aprender a comunicarse, primero debemos aprender a escuchar.. También nos dice, que nos hemos aprendido a escuchar el MENSAJE DE JESUS, porque le dimos énfasis al lenguaje. a las palabras, a los acontecimientos, y al dar tal importancia a la palabra escrita, el mensaje se perdió, por eso, para este tiempo, se necesita descubrir la Fuente de Dios, tener una conciencia contemplativa y sentir esa Presencia Divina en nosotros.

La Nueva Era exige un esfuerzo en la maduración de la Visión del Hombre, de su cultura y de nuestro Planeta…

Gracias por todos sus comentarios y reflexiones enviadas,, y sobre todo el estar compartiendo esta experiencia de vida con ustedes…